La verdad es que el rock urbano no es algo que me entusiasme del todo, pero todo cambia si delante tenemos a grupos como Noprocede, que en Noviembre del 2016 lanzaron su último disco hasta la fecha: Grisú.
Grisú es un disco muy emotivo, que en su conjunto me cuenta una historía romántica. La primera canción, “Ser Eternos”, describe la fase inicial del amor: los hormigueos en el estómago y las promesas que se hacen… Sigue con “Mátame”, en la que nos narra la pasión del principio, pero pronto comienzan las dudas, los desencuentros, con “Mas Calibre”. Todo se veía venir, el fin estaba por llegar, pero en “Para Los Restos”, la esperanza de aferrarse a lo que quedaba, aún está latente. La relación llega a su fin en el quinto corte, “Baldosas”, se respira un ambiente melancólico, aunque con cierta esperanza. El argumento del disco se vuelve más turbio en “Saltan Las Ratas”, llega el bajón, ese popurrí de emociones: odio, miedo, pero también ilusión. Todavía queda esperanza para el protagonista, alguien se cruza en su camino y lo lleva a “Ciudad Olvido”. Lamentablemente en “Fuera De Combate”, la necesidad por conocer la verdad y los recuerdos, le impiden quedarse en el olvido. Con “Echarte De Más”, todo empieza a dejar de importar, aunque con cierta radicalidad. Pero todo el mundo sabe, que hasta que no puedas mirar hacia atrás, y se te dibuje una sonrisa, no lo habrás superado y así lo cuenta en “Que Se Quite El Frío”. Ahora sí, mas tranquilos podemos volver a “Ciudad Olvido”.
Lo que más destaca del trabajo, son las letras. En cuanto a la composición musical, llaman mucho la atención la voz, las guitarras, los estribillos pegadizos y las diversas emociones que transmiten con el conjunto de su trabajo. Noprocede, es un grupo muy recomendable, cuentan con muy buenos directos y discos cuidados.
Willy Copa.