El pasado viernes 23 de febrero fue una noche inolvidable y que teníamos guardada en nuestro calendario de conciertos. Ciclocéano se disponía a presentar su segundo disco «Signos de Interrogación» en la Sala El Sol en pleno centro de Madrid junto a Nôrte.
Antes de dar paso al concierto, cabe señalar que por las inmediaciones cercanas a la Sala El Sol, hay muy buena oferta de cervecerías y taproom para tomar una buena cerveza artesana. Si te pasas por la calle Echegaray vas a poder encontrar el taproom de Península y también Brew Wild. Nosotros elegimos el segundo, ya que es el taproom de cervecera LaQuince. Es una recomendación que te hacemos, porque allí hacen muy buenas pizzas y platos de pastas italiana, que puedes combinar con sus birras. Si te gusta el lúpulo, no dudes en pasarte.
Y ahora vamos al lío con el concierto. La noche arrancó con la actuación de Nôrte, que venían desde Tarragona por primera vez a Madrid. Fue todo un acierto, ya no solo por la sala, sino también, por poder compartir escenario con una banda como es Ciclocéano, ya que presentaba disco, lo que jugó a su favor. Así que podemos decir que era la primera vez que les veíamos en directo. Podemos contar que, es un proyecto de rock alternativo con tintes de pop. Me sorprendió positivamente que contasen con tres guitarras en lugar de dos, como estamos acostumbrados a encontrar en las formaciones. Pues dos de ellas eran Fender y la otra Gibson. Venían a probar suerte en una nueva ciudad para ellos con un nuevo EP a presentar. Se titula «Contrarreloj», que lanzaron en 2023 y da nombre a la gira. «1988» era presentada como un tema que les ha dado grandes alegrías. Con «Contrarreloj» terminaron lanzando un mensaje hacia el final, que decía: «es mejor probar, que equivocarse». Además con «Realidad» consiguieron meterse a la audiencia en el bolsillo gracias a la labor de Gerard, su vocalista. Momento enérgico en el comienzo de esta canción con el solo de guitarra. Pues si, la actitud la tenían. Eran poquitos temas los que trajeron y supieron defenderlos en todo momento. Se despidieron presentado un nuevo tema que de momento es inédito, «Todo y Nada». Lo hacían con un acompañamiento de palmas por parte del público. Con ello llegaron los agradecimientos a Hector de Let’s Show y Ciclocéano por hacer posible que estuvieren aquí y a Raúl Lara por ser el productor del concierto.
Ahora pasamos al plato fuerte y estrella. Nos referimos a Ciclocéano, que como ya habíamos comentado más arriba venían a presentar su nuevo disco «Signos de Interrogación». Antes de nada comentar que, es la primer vez que ofrecían un concierto en la icónica sala El Sol; pero Antonio Curros, su vocalista tuvo su primera incursión aquí, hace unos años cuando fue invitado a colaborar con Estirpe, la banda de nuestro querido amigo fallecido Manuel Ángel Mart, a quien recordamos con cariño. Y ahora vamos al lío con la actuación. Cabe Señalar también, que su bajista Fer Vilar, no pudo estar presente, ya que se encontraba enfermo con algún problema de salud. En su lugar contaron con un grande de las cuatro cuerdas. El es Salim de La Ganda Calé. Abriendo paso con «Canta Para Mí», un tema del segundo álbum, que estaban presentando. Aquí el bajo tubo mucha importancia y se mezclaba con la parte rítmica. Después de este comienzo, llegaron unos as de batería, que con ellos dieron paso a «Planes de Fuga» y los allí presentes en la sala, no dudaron ni un segundo en cantar desde el inicio. Así que supieron demostrar que, conocían la canción. Por otra parte es de resaltar que, Antonio fue combinando durante la actuación diferentes guitarras.
La primera colaboración de la noche llegó cuando Nuria y Edu Molina aparecieron en escena para hacer posible «Arqueología Radical», donde ella destacó con su gran voz y él con su guitarra y esa energía y actitud que emanaba sobre ellos dos. Pero además, no se olvidaron de la canción que más nos gusta, «Para Volvernos A Encontrar», cuyo videoclip está grabado en directo en la sala Capitol de Santiago de Compostela, la ciudad de origen de Antonio. Y lo destacamos, porque fue uno de esos momentos en el que el público se puso a cantar sin pensarlo desde el minuto cero, demostrando que conocía a la perfección el tema y es de agradecer. También tuvieron la suerte de contar con German González, que es el vocalista de Skunk D.F y de la banda de reciente formación Barsinë en «Mi Propia Nave Espacial», lo que aportó más flow al tema. El momento más íntimo de la noche llegaba con «De Cabeza A Corazón«, cuando Antonio y Xavi se quedan solos en el escenario y se sentaban en el borde de éste a la voz y la guitarra nada más. Desde entonces, se convirtieron en el centro de miradas del público. Fue bastante mágico este momento. A partir de ahí el concierto estaba llegando a su fin. Ciclocéano no podía dejarse sin interpretar «Signos De Interrogación» y «Ley de Antigravedad», dos de los temas más importantes del disco a presentar. Y así fueron sucediendo. Y finalmente se despidieron por todo lo alto con «Cianuro», el primer single que lanzaban con su primer disco «Líneas de Meta». Este momento fue muy cercano con el público, ya que Antonio y David se bajaron del escenario y se encontraron con los seguidores y seguidoras que se dejaron caer por la sala, mostrando mayor cercanía, mientras terminaban de intentar este maravilloso tema, que tantas alegrías les ha dado. Acabaron el concierto agradeciendo a la prensa por estarán allí dando cobertura, porque según contaron son un grupo autogestionado y les cuesta mucho llegar a los medios.
Crónica por: Gloria A.B
Fotos por: Pedro Bao
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