Con un EP y dos discos, y definidos por el propio Guillermo Izquierdo de Angelus Apatrida como “el futuro”, ULTRA-VIOLENCE ya mueven su propia legión de seguidores. Pudimos comprobar como en la sala Changó se arremolinaban un buen montón de thrashers para disfrutar con la descarga de estos chicos. Los italianos hacen un thrash metal tan potente como convincente. Así pudimos sentir el poder de una máquina de guerra sonora con canciones como “Burning through the scars”, “L.F.D.Y.”, “In the name of your god”, “Lost in decay” o “Fractal dimension”. El batería Simone Verre castigaba su instrumento con tanta felicidad como rapidez y contundencia, hacían lo propio a las cuatro cuerdas Roberto “Romma” Dimas y el guitarrista Andrea Vacchiotti con su camiseta de Starwars a las seis, mientras como frontman Loris Castiglia lo partía con poderosos puñetazos al aire de dominio total. Ultra-Violence fueron sin duda una gran elección para telonear el show de los manchegos Angelus a los que acompañarían en su descarga en Barcelona y se unirán a Toxic Waltz para sus fechas por Europa.
Varios factores hacían prometer el show de ANGELUS APATRIDA como muy especial. Concierto de un grupo tan incontestable en disco como en directo, fin de gira de presentación del gran disco que es “Hidden evolution”, la grabación del dvd y el cd como documentos para la posteridad, el lugar: este Madrid donde siempre les hemos recibido con los brazos abiertos y muchos seguidores llegados desde varios puntos que vinieron a propósito para la ocasión. Resultado: Sold out, caras de satisfacción y muchísimas ganas de repetir.
Sonó a modo de introducción el himno de Suicidal Tendencies “You can´t bring me down”. ¿Cuántas bandas pueden permitirse poner un temazo como ese y dejar boquiabierto hasta al más pintado con su propio material justo después? Pues Angelus Apatrida está entre esos grupos con tanta calidad como para igualarse y superar a muchos de los grandes ídolos guiris. El perfecto ejemplo del alumno que supera al maestro. Tomaron posiciones para abrir fuego con “Immortal”, tema idóneo para comenzar una orgía de thrash metal, ya sólo con la primera canción me sabía la boca a sangre. Con ánimo de no dar ni un momento de tregua, siguió la trepidante “Violent dawn”, la percusión de Víctor Valera implacable con ecos, la base de bajo de José J. Izquierdo a tope, las guitarras asesinas de David Álvarez y Guillermo Izquierdo con su voz desesperada pura técnica. Llevaban tiempo sin tocar la canción que da título al último disco “Hidden evolution” y la decisión de incluirla en el setlist fue todo un acierto, porque este temazo levantó pasiones.
Especialmente celebrada por la sala fue “Vomitive” con todos los brazos alzándose en alto y gritar al mismo tiempo el grito de guerra “Vomitive!!!”. Angelus lo daban todo y el feedback que recibían de los hinchas era espectacular. Y otro más de los grandes temazos de la banda: “Of men and tyrants”. En la siguiente “End men” hubo una especie de falso comienzo que quedará simpático si la banda decide incluir tomas falsas en el dvd. De esta canción destacamos especialmente ese duelo de punteos de trémolo chillón entre Guillermo Izquierdo y David Álvarez que ejecutan con maestría mientras el “Pollo”, conocido metalhead rompía el hielo en la práctica de los mosh, que se sucederían desde ese momento con más frecuencia.
Guillermo hizo un guiño a los Anthrax con esa reconocible entrada de guitarra de “I am the law”. Y aprovecharon para anunciar la cerveza marca “Angelus”, la cual dieron a catar a las primeras filas vaciando sus botellas en chorro. Más cañita brava con “Fresh pleasure” y para cuando llegó “Give´em war” la sala ya era toda una exhibición de mosh. De nuevo material caliente más reciente con “First world of terror” y más remoto con “Versus the world” canción muy a propósito para lanzar una declaración de desprecio y asco hacia la política de Donald Trump (Como dicen los Brujería: “Fuck you, puto!”).
Tras un descanso de tanta brutalidad técnica, Angelus volvieron a las tablas. Se procedió al sorteo de una guitarra cedida por la marca Jackson, marca habitual de las hachas de los Angelus. Sonó la intro de “The Manhattan Project” y descargaron la frenética “Blast off”. También se incluyó en el repertorio “Corruption”, a modo de denuncia de la corrupción política que no dejamos de padecer en este país. Además dedicaron la siguiente canción, “Serpents on parade”, a la última víctima de la absurda censura y condena penal del Tribunal Supremo, César Strawberry de Def Con Dos.
Y para cuando atacaron con una acelerada ejecución de “Thrash attack” el mayor desmadre que os podáis imaginar se desató en la sala. Una gran multitud de seguidores subieron al escenario a botar, a bailar, a hacer air-guitar y a saltar desde el escenario. Toda una lección de hermandad y diversión en esta nuestra comunidad thrash.
Y llegó la despedida con “You are next” el himno de cierre de la banda. Un trallazo de canción que ha quedado en el repertorio como la traca final de unos grandísimos directos. Tras la foto final con los seguidores detrás, la banda saltó al ruedo y se dió un baño de masas sujetados en volandas por los brazos de los hinchadas. Has pasado dos horas de concierto y aunque estés exhausto, ronco o te hayas partido la cabeza, te quedas con ganas de seguir y seguir. Enhorabuena, Angelus Apatrida, estáis haciendo historia.
No se vayan todavía, aún hay más: Guillermo Izquierdo prometió una sorpresa próxima, pero no desveló nada aún. Tendremos que estar al loro del Facebook de la banda para enterarnos.
Crónica por: Miguel A.R.